Descubrí que nunca voy a ser tan interesante. No es un gran descubrimiento, hay que decirlo; la mayoría de la gente no es interesante; no tiene una vida plagada de momentos dignos de ser relatados minuciosamente, así que muy a mi pesar terminé pareciéndome a la multitud, eso que tanto temía.
No es tan grave tampoco. Supongo que lo que te puede distinguir es tratar de llevar esa desgracia con hidalguía.
2 comentarios:
Que uno se vea interesante a sí mismo? Cosa rara....
Hay que ver qué piensa el resto de vos...
A mí al menos me resulta muy interesante leerte...Y me alegro de hacerlo en este volver a mi espacio que tengo tan abandonado...Me visitarías así me das una mano en esta vuelta al ruedo? Ya volveré por aquí...
Tal vez la clave sea verse a sí mismo interesante, como para tratar siempre de conocerse un poco más. Tengo mis días, no lo voy a negar. Si me aburriera soberanamente conmigo misma la cosa sería fatal.
Besos, Gla.
Publicar un comentario