miércoles, 24 de marzo de 2010

24 de marzo. Lo que nos robaron

"Ahora es un viejo álamo carolina porque han pasado dos veranos por lo menos, si no lleva mal la cuenta. Ahora crece más despacio, casi no crece. En primavera echa las hojas en el mismo sitio que estuvieron el otro verano y por arriba brotan unas crestitas de su verde más encarnado que al caer el sol se encienden como por dentro, pero él ahora no es más que eso, esa dulce luz del verano que lo cubre como un velo. Y dentro de esa luz está él, el viejo álamo, todo recuerdo. De alguna manera ya estaba ahí hace dos veranos, cuando asomó sobre la tierra y crecer no fue nada más que como pensarse. Sólo que ahora recuerda todo eso, se piensa para atrás, y no nace otro árbol. En eso consiste la vejez. Verde memoria".
La balada del álamo carolina, Haroldo Conti.

(Haroldo Conti fue secuestrado el 5 de mayo de 1976 por una brigada de "inteligencia" del ejército argentino -sepan disculpar comillas y minúsculas-. Desde entonces, continúa desaparecido). 

Tal vez sea egoísta, esto de pensar algunas tragedias de acuerdo con lo que hemos perdido; o, mejor dicho, lo que nos han robado.
Nos robaron la preciosa poesía escondida en la prosa de Haroldo Conti, nos quitaron la lucidez de Rodolfo Walsh, desaparecieron a Héctor Oesterheld. Y a tantos otros. Tantos, que casi no notamos que si el desaparecido hubiera sido uno solo, igual habría sido absolutamente desatinado el delirio de intentar apropiarse del pensamiento de todos y de querer ejercer el poder por medio del terror, la tortura, la muerte.



Héctor Oesterheld, guionista de historietas, fue secuestrado en 1977 y continúa desaparecido.

Da mucha tristeza pensar todo lo que podrían haber hecho estas personas si hubieran continuado con su labor: hacernos pensar, obligarnos  a mantener la cabeza abierta, a pedir por una sociedad más justa, a soñar con un mundo mejor.
Hoy, para más de uno, esas cosas parecen delirios absurdos, y es esa la pérdida más grande.
Es el gran saqueo al que nos vimos sometidos durante más de siete años y del que no terminamos de recuperarnos.
Que muchos se hayan comido el verso de que la sociedad no puede ser más justa porque "pobres habrá siempre", que otros o esos mismos piensen que con los milicos estábamos mejor, que muchos se quejen de que no hay con qué darle: acá hace falta mano dura; todo eso no es más que la semilla mala que, al igual que la buena, si encuentra tierra fértil y está bien regada, brota, crece y se reproduce y muere dejando, a su vez, más semillas.

Rodolfo Walsh terminaba de esta manera su larga Carta Abierta a la junta militar cuando esta cumplía un año de mandato:

"Si una propaganda abrumadora, reflejo deforme de hechos malvados, no pretendiera que esa Junta procura la paz, que el general Videla defiende los derechos humanos o que el almirante Massera ama la vida, aún cabría pedir a los señores Comandantes en Jefe de las tres Armas que meditaran sobre el abismo al que conducen al país tras la ilusión de ganar una guerra que, aún si mataran al último guerrillero, no haría más que empezar bajo nuevas formas, porque las causas que hace más de veinte años mueven la resistencia del pueblo argentino no estarán desaparecidas sino agravadas por el recuerdo del estrago causado y la revelación de las atrocidades cometidas.
"Estas son las reflexiones que en el primer aniversario de su infausto gobierno he querido hacer llegar a los miembros de esa Junta, sin esperanza de ser escuchado, con la certeza de ser perseguido, pero fiel al compromiso que asumí hace mucho tiempo de dar testimonio en momentos difíciles". 

Al día siguiente fue asesinado. 

Pensar en lo que nos han robado es una de las tantas maneras de apropiarse de eso que fue nuestra historia, de eso que hoy nos configura tal y como somos hoy. A lo mejor, también, sirve para proteger lo que nos queda, y para darnos cuenta de quiénes son los que nos quieren seguir desapareciendo.  

DESAPARECIDOS
Están en algún sitio / concertados
desconcertados / sordos
buscándose / buscándonos
bloqueados por los signos y las dudas
contemplando las verjas de las plazas
los timbres de las puertas / las viejas azoteas
ordenando sus sueños sus olvidos
quizá convalecientes de su muerte privada

nadie les ha explicado con certeza
si ya se fueron o si no
si son pancartas o temblores 
sobrevivientes o responsos

ven pasar árboles y pájaros
e ignoran a qué sombra pertenecen

cuando empezaron a desaparecer
hace tres cinco siete ceremonias
a desaparecer como sin sangre
como sin rostro y sin motivo
vieron por la ventana de su ausencia
lo que quedaba atrás / ese andamiaje
de abrazos cielo y humo

cuando empezaron a desaparecer
como el oasis en los espejismos
a desaparecer sin últimas palabras
tenían en sus manos los trocitos 
de cosas que querían 

están en algún sitio / nube o tumba
están en algún sitio / estoy seguro
allá en el sur del alma
es posible que hayan extraviado la brújula
y hoy vaguen preguntando preguntando
dónde carajo queda el buen amor
porque vienen del odio.

Mario Benedetti


14 comentarios:

Gurisa dijo...

Ahhh... Mile...

El "qué hubiese pasado" es algo que se repite a lo largo de los ya 200 años de historia de nuestro país. ¿Qué habría sido de nosotros si Moreno no hubiese sido asesinado? ¿Qué habría pasado si Evita no moría de cáncer? ¿Qué habría pasado si los políticos en su momento hubiesen escuchado a Favaloro?

Lo único que deberíamos aprender de los "qué hubiese pasado si..." es que hay que cuidar, proteger y fomentar la aparición de personas tan geniales como los que dejamos ir, ya sea porque han muerto o porque decidieron migrar a lugares donde sí les dan oportunidad de desarrollarse.
De la historia se aprende los aciertos y errores de otros, para crear oportunidades, para evitar fracasos, para no volver a cometer una y otra vez el mismo error.
Pero, lamentablemente, somos un pueblo "adolescente", donde nos rebelamos ante la experiencia de nuestros mayores porque queremos experimentar en carne propia la vida.
Creo que, después de 200 años, ya es tiempo de madurar...

Milenius dijo...

Hola, Gurisa: creo que hay que distinguir entre lo que fue una muerte por cáncer, como la de Eva, o el error puntual de un momento político, y el desastre que hicieron los ideólogos de una política absolutamente basada en el terror.
No dejamos ir a estos intelectuales. Los mataron a mansalva. Los mataron por lo que decían y por lo que pensaban, sobre todo por esto último: el pensamiento resultó ser un arma verdaderamente poderosa, y se convirtió en excusa para cometer crímenes aberrantes. De eso no nos hacemos cargo, del poder que tiene pensar... quizás porque, tal como decís, somos un pueblo bastante inmaduro.

Sobre la historia de hace 200 años, sinceramente, no puedo discutir, porque no tengo capacidad.

Y creo que lo que escribí resume tu propuesta: justamente lo que señalo es la necesidad de cuidar lo que tenemos, de no dejárnoslo arrebatar en nombre de quién sabe qué grandes promesas.

Tal vez a algunos les conviene que seamos siempre adolescentes, y cuando nos ven empezar a crecer nos empiezan a pisotear...

Besos, Guri.

Abrujandra dijo...

No podemos agregar algo más, S. Mayor llora y yo tengo algo atragantado desde siempre.
Te queremos mucho.

Rapote dijo...

Como las bombas gringas de Hiroshima y Nagasaki, pasan años, lustros, décadas... Y todavía hay secuelas. Heridas que no cierran y sangran todavía (como dice el tango).

Que "Nunca Más" no sea un eslogan sino una fuerte convicción.

Saludos.
Rapote

La candorosa dijo...

Un post impecable!!!


Nos robaron demasiado y eso, hoy se siente...

Las ausencias de seres pensantes, no se puede cubrir con olvido, menos con mentiras.

Debemos tener memoria, para evitar nuevos planes de exterminio.

Como contrapartida de los que se comieron el verso y que aún siguen dormidos acunados por falacias y engaños, debemos estar los que guardamos memoria y conciencia para cuidar lo que nos queda!


Abrazos!!

Milenius dijo...

Abru: supongo que será el mismo hueso que tenemos muchos.

¡Un beso!

Milenius dijo...

Rapote: ojalá terminemos de convencernos todos de que esa no es la manera de zanjar las diferencias.

Un beso.

Milenius dijo...

Cando: bien lo decís vos en tu post, es la memoria la que nos salva de futuros golpazos.

Abrazos y gracias.

Marcelo Cafferata dijo...

Un post plagado de lucidez.
Primeramente te felicito por la elección de lo que pusiste y por la claridad de tu exposicion.

Solo me sumo al minuto de silencio y el mayor de los respetos a los que todavía hoy, despues de tanto tiempo, continuan desaparecidos aunque vivos en nuestra memoria activa.

Besos, y nuevamente felicitaciones y gracias!

Milenius dijo...

Marcelo: gracias. Será que la lucidez se esconde en las cosas que más nos duelen.
Cada vez que releo la Carta Abierta de Walsh, lloro de impotencia.
Ayer agarré un librito-homenaje a Haroldo Conti, y en él leía el testimonio de su tía: "Él, como yo, le tenía miedo a la muerte. No a la muerte en sí, sino al sufrimiento. Por eso me inunda de pena pensar qeu lo hayan torturado. Debe haber sufrido mucho. Se me hace un nudito en el corazón si pienso que lo han torturado".
Pienso en esas cosas, en el terror que le tenemos al dolor y en cómo alguien puede usarlo para "corregir", "reencaminar" al otro. Me parece una locura aberrante.

También, esa tía recuerda un anónimo japonés que aparece al principio de "La balada...":

"Ciruelo de mi puerta
si no volviese yo,
la primavera siempre
volverá. Tú florece".

A mi se me estruja el corazón, otra que nudito.
Pero supongo que lo que mejor podemos hacer es florecer, ¿no? Y honrar la vida en nombre de tantos que murieron.

Besos.

(El libro es "Haroldo Conti. Una épica del río y la llanura", de Néstor Restivo y Camilo Sánchez, IMFC, colección Desde la gente).

El Viejo @gustín dijo...

Lo q desapareció es el futuro.
Hoy la historia sería distinta.
y no contada x aquellos q se suben al carro del progresísmo, para mas de lo mismo...

un beso Mile y gracias x tu aporte a la memoria.


PD. devuelvan el cuerpo del Roby; Benito, exhibido como trofeo de guerra.

El viejo mudado

Milenius dijo...

Hola!! tanto tiempo, @gustín!
Quiero pensar que al futuro podemos hacerlo, por favor, no me quites la ilusión!

Besos, vecino.

Marcelo Cafferata dijo...

Gracias Milenius por tu respuesta!
Otro que nudito, flor de estruje de auriculas y ventriculos.
El corazon en pedacitos... a juntarlo con pala.

Gracias nuevamente!

Milenius dijo...

Graciausté.
¡Beso!

Me hubiera gustado que me dedicaran...

  • Cartas a Milena (obvio) - Franz Kafka

Algunos libros que me hubiera gustado escribir... Bueno, por lo menos los leí!

  • Rayuela - Julio Cortázar
  • El libro de los abrazos - Eduardo Galeano
  • Alicia en el país de las maravillas - Lewis Carroll