Esta vez subimos más todavía, y nos fuimos a La Quiaca, y de allí cruzamos a Villazón, Bolivia.
Dos anécdotas "culinarias".
En Villazón no hay bares; y, muertos de sed, encontramos un lugar donde vendían pollo frito. Allí vendían gaseosas. Como R. detesta la Coca Cola, queríamos un agua mineral para él y una Coca chica para mi. "¿Van a comer pollo frito?", dijo la camarera. "No. Sólo queremos una coca chica y un agua mineral". "Coca chica no hay". "¿Agua mineral?". "No hay". Nos levantamos y salimos.
Un almacén, allá, con un cartel enorme de Coca Cola:
- Hola, queríamos una Coca Cola.
- No hay.
- Agua mineral.
- No hay.
- Agua tónica (dijo R., y yo pensé: "creo que se apunó mal").
- No hay.
Finalmente, a cuatro cuadras de allí, conseguimos un quiosco donde nos vendieron un agua mineral tirando a tibia. Algo es algo.
Vueltos a La Quiaca, y haciendo tiempo hasta la salida del micro, fuimos a la confitería de la terminal. Allí, dos teles gritaban a todo volumen para un público compuesto por tres personas: el mozo, R. y yo.
- Por favor, una Coca, un agua mineral y dos sandwiches de jamón y queso.
- No, sandwich no va a poder ser, porque la cocinera no llega hasta las 7 y media de la tarde.
- (yo, incrédula) ¿No hay sandwiches?
- No.
- ¿Algo para comer?
- Voy a ver qué consigo.
A su vuelta, el mozo nos trajo dos bizcochos de grasa enormes, la Coca y el agua.
Yendo para el baño, me cruzo con una heladera con puerta de vidrio. Allí descansaban, a la espera de una cocinera que supiera cortar fiambre y unos panes, un jamón de proporciones considerables y un queso que se veía exquisito.
Hay veces que uno tiene ganas de ser delincuente. Yo hubiera atracado la heladera con todo gusto.
De yapa, Juan Baglietto. Con esta canción me siento identificada. Cambiar corpiños por calzones y chicas por chicos, por favor.
17 comentarios:
Digalé a R. que tampoco soporto la Coca!!
Me reí con lo de la cocinera ausente para poder hacer un sánguche!! ajajaaaaaa
Tanto periplo por un poco de agua ¡¡¡y uno de jamón y queso, será dedió!!
De haber estado yo cerca, ¡¡la ayudaba a manotear la heladera, eh!!!
Besototes y candores aguateros.
Estimada, Uds. han salido de expedición. No se puede andar sin provisiones!
Créame, ahí arriba son todos vagos. Y dentro de un siglo van a estar igual. Un té de coca hubiera sido más fácil quizá.
Aún con estos contratiempos sigue siendo un lugar para visitar una vez en la vida.
Un saludo afectuoso.
Villazón es un lugar de mierda, la diferencias culturales son tan grandes que difícilmente te sientas a gusto en ese lugar.
Lo de la Quiaca me resulta extraño, a menos que sea como ir a Las Toninas, un miércoles de agosto y buscar Parisiennes Box.
Posdata: Winter, no sé si se trata de vagos, lo que si es seguro que a esa altura apenas podés caminar, además como dije, la cuestión cultural.
Saludos.
Candorosa: Ya se lo dije, ahora no se siente tan solo.
Las costumbres son muy distintas, y uno se siente medio perdido.
La próxima vez me llevo una cantimplora, qué quiere que le diga...
Pero lo del sandwich me mató...
¡Un beso, doña! Ya voy a colgar su premio, con entrada especial, como se merece. ¡Gracias!
Winter: tengo que discrepar, la verdad es que no vi vagos, al contrario, la gente trabaja muchísimo, pero hay costumbres que, como le decía a la Candorosa, son muy distintas. Por ejemplo, tampoco conseguíamos fácilmente agua para tomar mate. El tema es que allá casi no toman, entonces en los bares no suelen dar agua caliente para llenar el termo.
Te de coca, sí, hay por todos lados, y muchísima gente masca coca para evitar los efectos de la altura que, te cuento, son importantes.
El lugar es para ir más de una vez, te lo aseguro. Y más de una persona con la que hablé tiene o tuvo en algún momento ganas de irse a vivir allá.
Pero, por suerte, no somos todos iguales.
Un beso grande.
Germán: tanto La Quiaca como Villazón, en mi opinión, quedaron un poco relegados a ser "lugares de paso" que, como todos los sitios de frontera, tienen características particulares, que uno muchas veces no alcanza a comprender. Y sí, las diferencias culturales son bastante marcadas.
En La Quiaca, el episodio del bar me resultó bastante desagradable. Lo del sandwich fue lo de menos, al lado de las dos teles prendidas a todo volumen. Pero eso pasa en Buenos Aires, y mucho más que allá. El tema es que siempre hay más gente, y entre tanto bullicio, hasta parece que la tele no estuviera. Abogo por los bares y restaurantes sin tele, ¡voto a la conversación entre los comensales!
Terminamos saliendo de ahí, y decidimos sentarnos en el cordón de una vereda hasta la hora de salida del micro, con eso te digo todo.
NekiTo: perdón por haber borrado el comentario, pero no permito insultos aquí.
Creo que cualquier cosa se puede dialogar; no es posible que todos tengamos la misma opinión sobre todos los temas, pero la idea es, siempre, comentar sin insultar a nadie.
Si bien hubo "palabrotas" (que no me molestan en lo más mínimo) en otros comentarios; no hubo ningún insulto directo contra alguien en particular, y ese es el motivo por el cual borré el tuyo.
Cuando quieras pasar de vuelta, y teniendo en cuenta esta condición, podés comentar lo que se te ocurra.
Un saludo, y bienvenido por estos pagos, ¡sólo si viene en son de paz!
Don Rodrigo, relator, que la calma no se pierda que si seguís discutiendo os vais a ir !HAYA PAZ¡
Que te voy a comentar de los lugares si ya te lo dije face to face
jejejeje... sí, hubo alguno que se fue a la... ¡HAYA PAZ! por favor...
besos.
o.O
Oh! Qué agobio! Qu´e sed! qué hambre!
Pero qué bonito viaje y que envidia!!!
Cris: fue un día raro, sí...
Pero el balance da positivo. Estoy feliz de haber tenido la posibilidad de ir.
Un beso.
Jaaja, anecdotas de viaje.
El tema del "Maestro" JCB; me viene como anillo al dedo (Otro XQ Aquel me lo saque!!)
Un beso.
Mile ahi comente lo de tu POST del recital de JCB
@gustín: Al sacarse algunos anillos uno se relaja un poco...
¡Besos!
Aaay, mija, abrir el pan, distrubuír las lonchas de jamón y queso es un arte sólo permitido a los maestros jajaja...
Chacha, ¿y qué beben por ahí? Porque si no beben ni agua :O
Besos
Oooyes, pero qué bien llevas el bolso.. Ohhhhhh, yo, esto, será de caradura pero jajaja, si los comentarios se abrieranenunaventanaseríamáscómodo jajajaja beeesos sonrojados
Ant: sí, y no había ningún émulo de Karlos Arguiñano o la hermana Bernarda por ahí, y nos quedamos con hambre...
nuuu sé... hay carritos por las calles, en los que hacen jugo de naranjas, pero supongo yo que quedaría tibio, con ese calor...
Ese bolso podía llevarme a mi dentro...
veré lo de los comentarios. Es que está así desde el inicio, nunca se me dio por cambiarlo. Quizás sea mejor, sí.
besos, hoy sin sed...
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